"Yo de eso no sé","Eso es cosa de vosotros, los informáticos","Sólo me faltaba a mí tener que aprender como hacer eso", "No tengo tiempo para eso", ...
No diré cada día, pero sí cada semana oigo frases como estás relacionadas con aportaciones para hacer las cosas de forma distinta, más eficiente, usando algunas de las herramientas tecnológicas que tenemos a nuestra disposición. Pienso que es algo cultural -a nadie se le ocurre que necesita un mecánico o un chófer para conducir un coche- sin embargo parece que para trabajar con software (ordenadores o internet) hace falta un informático. Esta forma de pensar hace que gente muy inteligente no sea capaz de detenerse un momento a analizar qué necesita y con qué herramientas puede solventar su problema.
Ahora se habla mucho de productividad y de cambio del modelo productivo pero parece que esos cambios los tienen que hacer otros, como si la productividad fuese algo que se nos da, algo que unos desconocidos gurús generan y nos lo ofrecen cuán maná.
La productividad es hacer las cosas mejor que antes (en menos tiempo, con menos medios, con más calidad) y ese concepto se aplica a todos y a todo lo que hacemos, desde enviar correos electrónicos a generar un procedimiento de cálculo muy complicado o distribuir una noticia interesante a nuestros amigos en Facebook.
Pero para mejorar hace falta pararse un minuto a pensar si lo que hacemos no se puede hacer mejor, conocer las herramientas de las que disponemos, estudiar, probar, equivocarse, en definitiva dedicarle parte de ese nuestro tiempo tan valioso a innovar y mejorar.
Para conseguir un país más productivo todos tenemos que serlo cada vez más en nuestro quehacer diario, si no lo hacemos otros lo harán y cada vez los veremos más y más lejos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario